El caracol terrestre Megalobulimus spp. ha sido registrado con gran frecuencia en cementerios prehispánicos de los oasis de San Pedro de Atacama, Chile, a pesar de su carácter ajeno al entorno desértico de esta región. Efectivamente, su hábitat se encuentra en el ambiente húmedo y tropical del noroeste de Argentina, por lo cual es señalado en la literatura arqueológica como indicador del intercambio de larga distancia, y que su función habría sido contener pigmentos colorantes. En este estudio multidisciplinario analizamos su presencia desde los contextos funerarios mismos, complementándolo con el análisis taxonómico de ejemplares arqueológicos y la revisión de datos biológicos-etológicos de dicho gasterópodo. Con ello presentamos datos inéditos respecto de la utilización de Megalobulimus en Atacama, brindando al mismo tiempo nueva información acerca de su vínculo con la práctica inhalatoria de sustancias sicoactivas. Concluimos que el significado simbólico del caracol podría vincularse a la renovación vital por medio del agua fertilizadora de la tierra, y que de ahí surgiría el interés por convertirlo en contenedor de sustancias pigmentarias, carbonáticas y/o alucinógenas. Así, dicho carácter simbólico permitiría explicar el rol que jugó el caracol Megalobulimus en las redes de intercambio ritual del área circumpuneña, y por extensión, en los Andes centro-sur.