Una investigación entre los 150 psiquiatras en prácticas e instructores de 24 países europeos (sobre todo de Europa Occidental) participantes en el Simposio Anual del EFPT reveló que, en la mayoría de los países, la supervisión y la observación en vivo no se utilizan en la formación. Para empeorar aún más las cosas, los psiquiatras en prácticas apenas reciben supervisión alguna. Cerca de un tercio de los participantes no han observado nunca durante el curso de su formación a un psiquiatra experimentado interactuar con un paciente. La mitad de los participantes no han sido observados nunca durante el curso de su formación mientras interactuaban con un paciente. El autor explica con detalle cinco de las razones por las que la supervisión y la observación en vivo son herramientas indispensables para formar a los psiquiatras. Concluye que es poco ético permitir que los psiquiatras en prácticas lleguen a ser profesionales sin esta clase de formación. Para que la psiquiatría se convierta en una profesión que se gane más respeto de los otros facultativos y el público general, es necesario que los psiquiatras experimentados tengan más respeto por su propia profesión, dando a los que están en prácticas una formación adecuada en el oficio de la psiquiatría.