Published online by Cambridge University Press: 20 January 2017
Planting glyphosate-resistant sugarbeet in narrow rows could improve weed control with fewer herbicide applications and cultivations. Field studies were conducted in 2007 and 2008 at multiple locations in Michigan to compare weed management and sugarbeet yield and quality in glyphosate-resistant sugarbeet planted in 38-, 51-, and 76-cm rows. At all locations, weed densities and biomass were less after glyphosate treatments than after conventional herbicide treatments. Weed densities and biomass also were less in 38- and 51-cm rows compared with 76-cm rows following a single glyphosate application when weeds were 10 cm tall. Averaged over row width, sugarbeet treated with glyphosate when weeds first reached 2 cm in height and again as needed thereafter yielded similarly to sugarbeet treated when weeds were 5 to 10 cm tall. However, root yields were reduced when glyphosate application was delayed until weeds averaged 15 cm in height. Sugarbeet root and sugar yields were greater from 38- and 51-cm row widths than from the 76-cm row widths, averaged over all herbicide treatments. Regardless of row width, initial glyphosate applications should be made before weeds reach 10 cm in height to maximize yield and minimize weed competition with sugarbeet.
La siembra de Beta vulgaris resistente al glifosato en líneas angostas, podría mejorar el control de malezas con menos aplicaciones de herbicida y labranzas. En 2007 y 2008 se realizaron estudios de campo en múltiples sitios en Michigan para comparar el manejo de la maleza y el rendimiento y calidad de Beta vulgaris resistente al glifosato, sembrado en líneas de 38, 51, y 76 cm. En todos los sitios, las densidades y la biomasa de la maleza fueron menores después de los tratamientos con glifosato que después de los tratamientos convencionales con herbicida. Las densidades de maleza y la biomasa fueron también menores en las líneas de 38 y 51 cm., comparadas con las líneas de 76 cm, después de una sola aplicación de glifosato, cuando las malezas tenían una altura de 10 cm. Promediado a través de los tres anchos de línea, el Beta vulgaris tratado con glifosato cuando la maleza alcanzó 2 cm de altura y nuevamente cuando se necesitara, tuvo un rendimiento similar al Beta vulgaris tratado cuando la maleza alcanzó una altura de 5 a 10 cm. Sin embargo, los rendimientos de raíz disminuyeron cuando la aplicación de glifosato se retrasó hasta que la maleza tuviera una altura promedio de 15 cm. Los rendimientos de raíz y de azúcar fueron mayores en las líneas con separaciones de 38 y 51 cm que en las de 76 cm., promediado a través de todos los tratamientos de herbicidas. Independientemente del ancho de las líneas, las aplicaciones iniciales del glifosato se deben hacer antes de que la maleza alcance 10 cm de altura para maximizar el rendimiento y minimizar la competencia de la maleza con Beta vulgaris.