Published online by Cambridge University Press: 20 January 2017
Se describe un contexto funerario correspondiente a una población costera del período Arcaico Temprano, cuyos rasgos se presentan como evidencia para proponer que la tradición Chinchorro sería de origen y desarrollo local. Los indicadores provienen del sitio Acha-3, vinculado a una tradición de adaptación marítima (9,000–8,000 a.P.). Estas evidencias validaría las siguientes propuestas: (a) define un patrón funerario, tecnológico y económico con fuertes vínculos Chinchorro; (b) la evidencia bioarqueológica demuestra que estos grupos manejaban una estrategia de subsistencia bien adaptada al ecosistema marítimo; y (c) representa un sitio funerario temprano para las tierras bajas del área centro sur andina, sustentado en dos dataciones de radiocarbono (no calibradas) de 8,120 ± 90 a.P. (Cuerpo 1) y 8,380 ± 60 a. P. (Cuerpo 3). El patrón mortuorio se caracteriza por una inhumación múltiple formada por tres individuos dispuestos en posición extendida, envueltos en pieles de camélido, lobo marino y esteras vegetales pintadas, con escasas ofrendas asociadas. Aunque no hay evidencias de momificación artificial, el claro intento de enfardar los cuerpos, la inhumación múltiple en posición extendida, y el contexto cultural asociado, nos permiten sostener la hipótesis de que la emergencia de las prácticas funerarias Chinchorro sería un desarrollo más bien local que alóctono.
Funerary remains of an Early Archaic coastal population in northernmost Chile have diagnostic features that support a local development and origin for the Chinchorro tradition. These remains are from Acha-3, a site 5.4 km from the coastline at the confluence of the Acha ravine and Azapa valley. Findings from Acha-3 (a) define funerary, technological, and economic patterns for the Early Archaic (9,000–8,000 B.C.) with strong Chinchorro tradition connections, (b) demonstrate a subsistence strategy adapted to the marine ecosystem by means of associated bioarchaeological data, and (c) identify the oldest funerary site known for the lowlands of the south-central Andes. Two radiocarbon dates place Acha-3 at the end of the Early Archaic period and link it, culturally as well as chronologically, to Acha-2, a campsite. A burial at Acha-3 contains three individuals wearing headbands fabricated from camelid and plant fibers. The bodies were wrapped with camelid and sea lion skins and decorated plant fiber mats in an elaborate funerary bundle, with few offerings. Although there are no signs of artificial mummification, the clear intention to straighten and stiffen the bodies in elaborate funerary bundles, the multiple extended inhumations, and the associated cultural elements suggest that Acha-3 treatments were local precursors to Chinchorro funerary practices.